Estamos en junio, mitad del año, y pronto como Grupo de la Virgen nos corresponderá realizar nuestro retiro para evaluar el caminar y definir caminos a seguir. Será un momento para estar a solas con Jesús, dejar que nos vea en la intimidad y mirarlo a el, a esa "hermosura que excedéis a todas las hermosuras." Un momento para agradecer, para simplemente dejarnos amar por El y permitirle que nos hable en el silencio, apartarnos de nuestros ruidos para escuchar el susurro de su dulce voz.
Nuestro Grupo nace como la respuesta de la búsqueda de personas de oración, de algo que vaya a lo interior, vivir la fe desde la contemplación y hacerlo guiador por María, teniendo como centro siempre a Jesús Sacramentado, pues sin El no somos nada. Pero no quedarse contemplando, sino llevar la fe a la acción. Hacer vida el mensaje de Misericordia de Cristo.
Hemos querido hacer mucho espacio para el Espíritu Santo quien es el guía de nuestro grupo. Invocándolo en cada una de nuestras reuniones, rosarios, adoraciones, siempre pidiendo que actúe. Se agrega a nuestros dos grandes amores nuestro Padre San José, a quien acudimos como protector y guardián. Los obstáculos, pruebas y turbulencias no han faltado y siguen azotando fuertemente nuestra barca, pero acudimos a la protección del Señor San José, seguros de encontrar en su intercesión remedio para nuestras penas.
Nos sigue distinguiendo tener a María como Reina, Madre y Maestra, bajo su advocación de Nuestra Señora de las Gracias que abre triunfalmente el Dogma de la Inmaculada Concepción. Esta pausa espiritual nos ayudará a definir capítulos que aun necesitan estudio e iluminación divina, en los que están las Constituciones propias de nuestra Asociación, el culto a los Sagrados Corazones de Jesús y María, la espiritualidad propia de nuestra asociación, Nuestra Señora del Rosario de Fátima y su mensaje como parte importante de nuestra espiritualidad, la Medalla Milagrosa y finalmente los Santos Patrones de nuestro grupo y el estudio de sus escritos y enseñanzas. Además se suma la convocatoria a la primera elección de directiva de nuestro Grupo.
Jesús nos espera, no se cansa de esperar, muchas veces siempre queda su mano ahí tendida, sediento, lleno de una sed que consumo, que se sacia solo con amor. Cuan fácil es leerlo y escribirlo, es dificil llegar a entender esa sed y aun mas difícil a saciarla, pues supone desprendimiento, sacrificio, oración. Esto para el que verdaderamente ama no es obstáculo, no es pesadumbre, no es dificil, simplemente el amado no se cansa de mirar a quien lo ama y su mirada consume en un fuego de amor su alma.
Les pedimos sus oraciones por nuestro grupo y esperamos poder servir a Jesús y María con humildad y amor.
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