El mes de noviembre es muy importante para el dogma de la INMACULADA CONCEPCIÓN. El 27 de noviembre de 1830 la Virgen Santísima se apareció por ultima vez a Santa Catalina y reveló ser "sin pecado concebida." 24 años más tarde, en 1854, la iglesia, especialmente gracias a los Franciscanos quienes fueron los mas grandes defensores de este dogma, proclamaba solemnemente el DOGMA DE LA INMACULADA CONCEPCIÓN DE MARÍA.
La aparición en Lourdes en 1858 fue la confirmación final de la Reina del cielo, cuando se presentó ante Bernardette como "la Inmaculada Concepción"
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